dijous, 3 de desembre del 2015

Glúteo menor

Tercer artículo de la serie de estructuras que pueden simular un dolor de tipo ciático. El glúteo menor cuando entra en disfunción puede causar unos signos y síntomas muy intensos que harán que la persona dude si tiene un problema con el nervio ciático.

Este es el más profundo y de menor envergadura del conjunto de músculos glúteos. Músculo dispuesto en abanico, a nivel proximal, su inserción en la pelvis se halla en la superficie externa del hueso iliaco, entre las líneas glúteas anterior e inferior. Distalmente se inserta, por medio de un tendón, en la cara anterior del trocánter mayor del fémur, por su parte más superior.
La principal función de este músculo, cuando trabaja con todas sus fibras, es la de realizar la abducción de la pierna. Puesto que esta dispuesto en abanico, si actúan las fibras más anteriores, situadas por delante de la de la línea media de la cadera, serán rotadoras internas y flexoras de la cadera. Si por el contrario, actúan las fibras dispuestas por detrás de la línea media, este músculo realizará la extensión y rotación externa de la cadera, pero hemos de destacar que esta última función es mucho menos efectiva que la anterior.


Cuando este músculo sufre una disfunción, el dolor el dolor se localizará a nivel local y el dolor referido que puede presentar nos llegará, en los casos más extremos hasta el tobillo, habiendo recorrido la cara lateral del muslo y la pierna. Este dolor puede muy agudo y dificultar la normal deambulación de la persona. La persona nos puede referir que el dolor la despierta por la noche si duerme del lado afectado, y que después de estar sentado un rato, la persona tiene dificultad en incorporarse y mantenerse de pie, siendo dificultosos, los primeros pasos por la intensidad del dolor.

Liberación manual del Piriforme: para conseguir relajar este músculo y que desaparezcan todos estos síntomas vamos a realizar un  masaje que abarque  toda la zona glútea, nos aseguraremos que estamos trabajando lo suficientemente profundo como para llegar a contactar con el glúteo menor, pues este es un músculo profundo (el masaje nunca será aplicado de una forma agresiva).
Una vez localizado el punto exacto donde se halla este músculo realizaremos una suave, pero firme presión, hasta conseguir relajar profundamente al glúteo menor ayudando a que desaparezcan estas molestias.



Autor: Josep Ferrer
Imatge: Josep Ferrer

dimarts, 8 de setembre del 2015

SACROTUBEROSO



Vamos a describir brevemente a este ligamento, en general poco conocido, y al que se confunde con frecuencia, cuando sufre una disfunción, con un problema del nervio ciático.



El ligamento sacrotuberoso está situado en la parte posteroinferior de la pelvis. Es plano, y de forma triangular, más estrecho en el centro que en los extremos; se inserta proximalmente en el borde lateral del sacro, hallándose su inserción distal en el margen interno de la tuberosidad isquiática. Las fibras más superficiales de este ligamento se continúan directamente con el tendón de origen de la porción larga del bíceps femoral. La superficie posterior del sacrotuberoso da origen, en toda su extensión, al glúteo mayor.



Cuando este ligamento padece una disfunción el dolor se localizará a nivel local y puede continuar hacia abajo por la parte posterior del muslo y la pantorrilla, pudiendo  llegar, en los peores casos, a la parte inferior del talón. Puede también acompañarse de sensaciones de adormecimiento y/o hormigueo en la zona del dolor.




Normalización del sacrotuberoso:
Para normalizar este ligamento podemos aplicar Masaje Transverso Avanzado. Para realizarlo la persona se colocará en la camilla en decúbito prono. Nos situamos en el lateral de la camilla, mirando hacia medial. Con el pulgar de nuestra mano craneal localizamos el borde lateral del sacro. Palpamos el ligamento y aplicamos MTA presionando contra el borde óseo, punto de inserción del ligamento, recorriendo el espacio comprendido entre la espina posterosuperior iliaca y el cóccix.


Autor:
Josep Ferrer
Imatge: Josep Ferrer

dimarts, 1 de setembre del 2015

¿ES GRAVE? (2)

En este capítulo vamos a abordar el tema de la tan famosa y mal comprendida “Ciática”. En efecto, si una persona sufre una alteración del nervio ciático, los síntomas y signos que presente van a ser muy graves pero, afortunadamente esta es una disfunción poco frecuente y a menudo es confundida por otro tipo de problemas mucho más benignos de los que aquí vamos a describir los más importantes.

En primer lugar hablaremos del piriforme, músculo clave en la estabilidad de la pelvis y de la cadera, teniendo una estrecha relación con el nervio ciático por su proximidad anatómica.


PIRIFORME

El piriforme es un pequeño músculo situado en la región sacra, originándose en la cara anterior y externa del sacro para insertarse en la superficie superior del trocánter mayor del fémur. Él es un rotador externo y abductor del fémur.
Cuando este músculo entra en espasmo puede desencadenar un dolor que abarque toda la nalga, la cara posterior del muslo llegando, cuando el dolor es muy agudo, hasta la planta del pie, simulando un dolor de “nervio ciático”. Se han descrito casos en los que aparece dolor en la defecación, y en los más graves pueden aparecer disfunciones sexuales, tanto masculinas como femeninas, causadas por una disfunción en este músculo. Podemos ver pues, que este es otro músculo candidato a confundir, con sus síntomas, a la persona que los sufre y que ésta llegue a pensar que padece un mal mucho más grave del que en realidad tiene.

Liberación del Piriforme: para conseguir relajar este músculo y que desaparezcan todos estos síntomas realizaremos un  masaje por toda la zona glútea, asegurándonos que trabajamos  lo suficientemente profundo como para llegar a contactar con el piriforme, pues este es un músculo profundo (de todas formas el masaje nunca será aplicado de una forma agresiva). Cuando hayamos  localizado el punto exacto donde se halla este músculo realizaremos una suave, pero firme presión, hasta conseguir relajar profundamente al piriforme ayudando a que desaparezcan las molestias.

No debemos olvidar que, según Beaton y Anson (1938), al menos en un 11% de la población, el nervio ciático, al salir de la pelvis en dirección a la extremidad inferior, atraviesa el vientre muscular del piriforme, quedando expuesto a posibles disfunciones por un exceso de tensión en este músculo. Sin lugar a dudas, si una vez liberado de estrés el piriforme, la persona sigue refiriendo las mismas disfunciones antes descritas, deberemos remitirlo al profesional sanitario pertinente.

Autor: Josep Ferrer
Imatge: Josep Ferrer

divendres, 31 de juliol del 2015

OBERT A L'AGOST

Benvolguts pacients, amics i companys,

El nostre centre romandrà obert tot el mes d'agost, si truqueu i no hi som, deixeu el vostre missatge i ens posarem en contacte l'abans possible.

Moltes gràcies i bon estiu!!

Telf. 93-780.25.58

dimecres, 15 de juliol del 2015

¿ES GRAVE?



A lo largo de los años de práctica de masaje en cabina me he ido encontrando con personas que antes de acudir a mi habían recurrido a uno o varios médicos en busca de solución para su estado, que ellos consideraban grave, pero que afortunadamente, después varias pruebas i análisis y del pertinente diagnóstico médico, resulto ser simplemente tensión muscular.

Por ello me he decidido a recopilar y a relatar varios de estos casos que, aun siendo una disfunción benigna, inicialmente causan una gran alarma en la persona que los padece. Músculos como el masetero, el pectoral menor o el piriforme, por nombrar solo algunos de ellos, cuando se contracturan pueden, por su sintomatología, confundirse con problemas más graves, causando una estado de ansiedad y preocupación en la persona que los sufre. Veamos pues cuál es esa sintomatología para poder aliviarla cuando se nos presente en cabina.

Empiezo por el iliocostal, uno de los más comunes, y poco a poco, a medida que me lo permita el escaso tiempo libre del que dispongo iré añadiendo más casos. Espero que sean de vuestro interés.


ILIOCOSTAL TORACICO

El músculo iliocostal forma parte de la porción más superficial de la masa muscular de los erectores de la columna. Se inicia en la región sacrolumbar, en la masa común, y toma dirección proximal ascendente dividiéndose en varias porciones, determinadas por sus inserciones y regiones por las que discurre. En su origen posee una gran masa muscular preparada para aportar fibras musculares a todas las inserciones. El iliocostal se compone de porción lumbar, torácica y cervical. Bilateralmente realiza la extensión de la columna y unilateralmente la lateroflexión ipsilateral.

Cuando la porción torácica de este músculo entra en espasmo, y más concretamente a nivel T4 – T8, puede desencadenar un dolor que abarque la zona comprendida entre el ángulo superior interno de la escápula, el borde interno de la misma, el ángulo inferior escapular y las vértebras torácicas de la cuarta hasta la octava. Si la tensión acumulada en el músculo llega a ser muy grande entonces el iliocostal empieza a “quejarse” pudiendo aparecer los siguientes síntomas:

  • Dificultad en la respiración profunda por la aparición de un dolor agudo y penetrante hacia la caja torácica
  • Aparición de un área de dolor en la cara anterior del tórax, en la zona media costal

Este último signo es el que muchas veces es confundido por la persona como un síntoma cardio-vascular, por lo que a menudo esta acude al médico pensando padecer una afección grabe que, afortunadamente, es rápidamente descartada por el profesional sanitario, y el problema es descrito como una simple tensión muscular. 


Liberación del Iliocostal: es conveniente relajar la musculatura de toda la espalda antes de entrar a liberar el punto causante de dicho malestar. Este masaje de relajación también nos ayudará a localizar la ubicación del punto con exactitud. Una vez descontracturada la zona realizaremos una suave, pero firme, presión sobre el punto sensible hasta conseguir relajar profundamente el iliocostal, no es de descartar encontrar puntos sensibles a varios niveles de este músculo.


PUNTO GATILLO DEL ILIOCOSTAL A NIVEL T-6


Autor:
Josep Ferrer
Imatge: Josep Ferrer